Como no todo el ocio en verano es televisión y videojuegos; desde Centro Psicología Bilbao nos gustaría proponeros actividades saludables para los más jóvenes de la familia. Hace unas semanas, os recomendamos una serie de libros para estas vacaciones, y en esta ocasión queremos hacer lo propio con esta selección de juegos de mesa que proponemos, pues estamos seguros de que proporcionarán a los pequeños (y no tan pequeños) unos ratos muy divertidos.

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  1. Jungle Speed

Es un juego rápido, de 3 a 8 jugadores, que –en función de la modalidad que se compre- se puede jugar a partir de los 6 años. La dinámica básica es muy sencilla: cada jugador muestra su carta y, si otro participante tiene otra igual, debe coger el tótem antes que él. Por supuesto, existen cartas y reglas especiales que hacen el juego más divertido.

¿Por qué lo recomendamos? Porque, además de garantizar un buen rato, ayuda a los jugadores a trabajar la atención, y a mantener la mente despierta. Las partidas son cortas (no más de 15 minutos), por lo que resultará un juego sencillo de gestionar y de combinar con otras actividades. Además, su pequeño tamaño y su formato en bolsa hacen que sea muy fácil de llevar al campo, a la playa, etc…

  1. Love Letter

Es un juego sencillo, de 2 a 4 jugadores (más divertido a partir de 3), pensado para participantes de al menos 10 años de edad. Rápido y sencillo de jugar:  Debes entregar una carta de amor a la princesa Anette, y para ello, quedarte, al final de la partida con el personaje más cercano a ella en la mano. Cada uno tiene una habilidad que podrás utilizar contra tus rivales.

¿Por qué lo recomendamos? Porque se trata de un juego muy sencillo, con pocos componentes (sólo 16 cartas y tókens para marcar las partidas ganadas) pero que resulta muy divertido y obliga a ejercitar la lógica y la deducción.

  1. Dobble

Dobble es un juego de cartas con 5 minijuegos diferentes. Se puede jugar desde los 4 años, pero hay ediciones para todas las edades. Tiene 55 cartas con un total de 50 símbolos dibujados. Cada pareja de cartas comparte un único símbolo idéntico y el primer jugador que los encuentre llevará la ventaja.

¿Por qué lo recomendamos? Porque, con pocos elementos, permite jugar a 5 juegos diferentes, todos ellos muy dinámicos y sencillos de entender. Los jugadores están en tensión, muy atentos durante toda la partida, y resulta muy entretenido.

  1. Time’s up:

Pareja contra pareja, compitiendo por adivinar la mayor cantidad de personajes que aparecen en las cartas antes de que el tiempo se termine. Primero, describiendo el personaje; después utilizando una sola palabra, y finalmente mediante mímica. Cada ronda es diferente, y todas ellas garantizan las risas. Se puede jugar a partir de 14 años, aunque hay versiones para jugadores más jóvenes. La partida completa dura unos 45 minutos, y se necesitan al menos 4 jugadores.

¿Por qué lo recomendamos? Porque se trata de un juego cooperativo, en el que es necesario empatizar con nuestra pareja para ayudarle a adivinar los personajes. Además, tendremos que ejercitar la memoria para recordar los personajes en juego, la expresión verbal para las descripciones, corporal para la mímica, etc… Cada ronda es diferente de la anterior, pero resulta igualmente divertida.

  1. Cash& Guns

Al contrario que los demás juegos que os hemos recomendado de momento, Cash& Guns es un juego grande, para jugar en casa, con un mínimo de 4 personas y a partir de 12 años de edad. Un grupo de mafiosos se reparte su último botín, y cada uno tendrá la opción de disparar cada uno a otro rival durante el reparto. ¿Te agacharás para evitar la bala? Puede que la pistola esté cargada o que sólo sea un farol, pero ¡si estás herido o huyes de las balas no podrás quedarte con el dinero!

¿Por qué lo recomendamos? Porque se trata de un juego muy entretenido para jugar con amigos o en familia. Las pistolas de gomaespuma y el momento en el que cada jugador apunta a otro añaden diversión. Ejercitamos la memoria y la deducción para tener en cuenta los disparos previos los demás jugadores y lo que harán a continuación; nos da la posibilidad de jugar de manera arriesgada o conservadora, y podemos además desarrollar una estrategia para ver qué botín nos conviene más.

María Reyzabal Ferrero

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