Un hecho que algunas veces debemos afrontar en la terapia es qué hacer cuando un paciente quiere dejar de asistir. Si bien no se trata de algo habitual, es un acontecimiento para el que todo psicólogo debe estar preparado; ya que la interpretación y el aprendizaje que se saque de esta situación resulta crucial para el posterior desarrollo profesional.
Desde nuestro rol como psicólogos, podemos considerar la baja como un fracaso, o bien como una oportunidad para mejorar. Cada una de estas alternativas nos lleva, respectivamente, a tirar la toalla –probablemente con un importante coste para nuestra autoestima- o a la introspección, reconociendo qué partes de la terapia han sido exitosas y en cuales nos hemos equivocado.
Pero, como ocurre con casi todo, la responsabilidad en este caso es compartida entre el terapeuta y el cliente. Así como el terapeuta debe plantearse en qué se ha equivocado para sacar partido y buscar nuevos enfoques, la responsabilidad del cliente estriba en anunciar con claridad su intención de dejar la terapia.
Afrontar una baja siempre es duro. Sin embargo, conocer, de boca del cliente, lo que va a pasar, permite contemplar el hecho desde otra perspectiva. No se trata de retener al cliente en contra de su voluntad; sino de saber cuál es, desde su juicio, aquello que ha faltado en las sesiones.
Por otro lado, a veces ocurre que el paciente no quiere, o no se atreve, a hacer explícita su intención de marcharse. Puede dejar en el aire la siguiente sesión, acordando ponerse en contacto en un futuro cercano, o incluso es posible que deje cerrada una fecha para volver al centro. En esos casos el psicólogo, más que aprender, pasa por una fase de confusión. Puede extrañarle que el cliente, que tenía una cita concertada, no aparezca en la consulta. Puede creer que se ha perdido, que se le ha olvidado la cita, que se ha ido de viaje, que no quiere volver… cualquier posibilidad es válida, porque partiendo del “hecho conocido” (que el paciente no ha acudido a terapia) todas ellas constituirían un motivo lógico.
El asunto se agrava si añadimos el hecho de que el profesional (psicólogo, terapeuta, coach, educador…) sí ha acudido a la cita, ha estado la hora entera en la consulta esperando a que apareciese el cliente con el que había quedado: está invirtiendo su tiempo de trabajo.
Ahora bien. El paciente que no se atreve a decir un “no” (que es un “no” a la terapia, y no a la persona), está librándose probablemente de una situación que para él resulta desagradable; pero al mismo tiempo está negando al terapeuta la oportunidad de mejorar, de saber en qué ha fallado para él. Del mismo modo que quien habiendo encontrado que la comida en un restaurante no es de su gusto felicita efusivamente al chef (o incluso reserva mesa para el día siguiente) y después no aparece por allí, el cliente que no dice que no va a volver deja al personal sumido en un estado de confusión.
Probablemente a la mayoría de los lectores les resulta descabellada la idea de proceder así en un restaurante. Siguiendo este sencillo ejemplo, animo a los pacientes actuar, a la hora de concertar una nueva sesión, del mismo modo en que lo harían si estuviesen planteándose si cenar o no en un restaurante: con sinceridad, y pensando que el “no” puede, lejos de perjudicar, enriquecer.
El equipo de Centro Psicología Bilbao
81 Comments on "Abandono de la terapia"
Rebeca
1 enero, 2017Hola.
Me ha gustado mucho su artículo. Voy a terapia desde hace 3 años. Estoy planteándome dejar de ir por diferentes motivos. Estoy muy agradecida a mi psicólogo pero en ocasiones pienso q debo dejar de ir, aunque aún tengo temas din resolver. Me gustaría saber cómo hacerlo. A veces he pensado dejarle un mensaje y despedirme a través de él pero... No sé si eso es correcto. M gustaría saber su opinión.
Muchas gracias
Beatriz Alonso Sánchez
2 enero, 2017Hola Rebeca,
Después de una relación terapéutica de 3 años, si considera que aún hay aspectos a trabajar, nuestro consejo es que hable en persona con su psicólogo/a y le explique las razones por las que se plantea dejar de acudir. Igual se puede replantear el trabajo en consulta o plantear un cambio de enfoque para ayudarle en esta fase de su vida. Si aún así decide dejarlo, después de tanto tiempo entendemos que siempre es mejor en persona para poder conocer también la visión del terapeuta, y hacer balance positivo de todo el trabajo realizado hasta el momento.
Aprovechamos para felicitarle la entrada de año,
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Rebeca
2 enero, 2017Muchas gracias por su rápida contestación.
Es cierto que aún me quedan muchas cosas por resolver dentro del proceso terapéutico que estoy siguiendo. Aún siendo consciente de ello, hay algo que hace meses que me inquieta. Siento que me preocupa DEMASIADO la opinión que puede tener mi psicólogo referente a lo que le cuento, hasta tal punto que hay cosas que me guardo por considerar que él puede juzgarme negativamente. ¿Es esto normal? ¿Puede afectar a mi terapia? Esta es la razón por la que, en ocasiones, sienta deseos de dejarlo.
Muchas gracias por todo.
Beatriz Alonso Sánchez
3 enero, 2017Hola Rebeca,
Lo ideal en una relación terapéutica es que sientas que se trata de un espacio al que vas para solucionar una situación, para poder hablar con sinceridad y confianza. Puede darse el caso en el que el psicólogo exprese ideas que sean contrarias a tu forma de pensar o de actuar, pero siempre debe hacerlo desde el respeto, tratando de ponerse en tu piel y entender tu situación y tu forma de vivirla. Lo que te sucede es algo que ocurre en ocasiones dentro de la terapia, y sería recomendable poder expresar ese miedo a sentirte juzgada. Quizá si le haces ver cómo te sientes, pueda cambiar la forma de comunicarse.
Lo que sí es importante es que si sientes que no puedes ser del todo sincera, esto sí puede afectar a la terapia porque el psicólogo igual no cuenta con toda la información necesaria. Es importante tener buen vínculo con él, sentirte cómoda, poder hablar sin miedo. Del mismo modo, esto no significa que el psicólogo siempre te diga cosas positivas. Habrá veces que igual te dice cosas que no quieres oír, pero que son necesarias expresar para mejorar dentro de la terapia.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Rebeca
4 enero, 2017Muchas gracias por sus respuestas.Plantearé a mi psicólogo todas mis dudas. Un saludo
Menrac
2 enero, 2018Yo también estuve mucho tiempo en terapia y aunque me daba mucho apuro ir y despedirme, creo que siempre es bueno dar una explicación en persona y además dejarse esa puerta abierta, sobretodo si el profesional se ha comportado como es debido. En resumen, es lo que se ha enterado este artículo. Yo te recomiendo que pidas cita y le comuniques tu intención de dejar la terapia
María Reyzábal
3 enero, 2018Buenos días Rebeca;
Agradecemos tu opinión, y, desde el punto de vista de los psicólogos, creemos al igual que tú que siempre es preferible dar una explicación. De lo contrario, el psicólogo se queda confuso, no sabe qué ha ocurrido y por qué el paciente ha dejado de acudir. El feedback siempre nos puede ayudar a mejorar como profesionales.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Alicia
13 enero, 2017Hola, buenas tardes.
Me ha parecido un artículo muy interesante.
El motivo de mi consulta no sé si es adecuado para este espacio pero me gustaría me pudiesen responder.
Llevo un año yendo a terapia. Estoy contenta. Es muy positivo para mí. El problema es que siento que me identifico mucho con mi psicólogo y eso me duele porque no puede ser una relación de amistad ni de nada. Soy consciente que la relación que tenemos es una relación profesional, él nunca ha dado lugar a confusión, veo que toma en serio su trabajo: su intención es ayudarme. Y se muestra cercano cuando lo necesito.
Me duele sentirme así por la necesidad de cariño y ternura que tengo. Me siento mal cuando me muestro agradecida por su comprensión y veo que pone los límites adecuados porque, aunque la teoría la entiendo, en la práctica me gustaría que él pudiese corresponder a mi cercanía(no estoy hablando en sentido amoroso), para de este modo atreverme, fuera de consulta, a ser así de cariñosa con los demás; es decir, atreverme a experimentar con los demás.
Bueno, no sé si con esto que cuento parece que pretendo decirle cómo debe hacer su trabajo. Ni mucho menos, no es mi intención. Me gusta cómo enfoca las sesiones, he aprendido bastante.
No sé si he sido clara en mi exposición. No me atrevo a hablar así de claro con él, tengo necesidad de hacerlo, porque no quiero que me mal interprete, pero al mismo tiempo pienso que me daría mucha vergüenza volver a consulta.
Muchas gracias por leerme.
Un saludo.
Beatriz Alonso Sánchez
16 enero, 2017Buenos días Alicia,
Sus sentimientos son muy comunes dentro de una terapia, más aún cuando es una terapia que dura cierto tiempo y en la que realmente siente que su psicólogo le ayuda. No es malo sentirse así ni tampoco tener necesidad de cariño o escucha y empatia. Entendemos también que hablar de estos temas en la consulta le de vergüenza y le pueda costar después continuar con la terapia. Por ello, para que sus sentimientos no se malinterpreten, una posibilidad sería expresarlos por escrito en una carta. Usted tiene la decisión final de darle a su psicólogo esa carta o no dársela y simplemente leerla usted para aclarar mejor sus emociones y entender mejor cómo se siente. Esto le ayudará a desahogarse, aclarar sus sentimientos actuales, reflexionar y, finalmente, si lo considera adecuado, compartirlo con su psicólogo.
Por otro lado, si finalmente decide no compartirlo, puede solicitarle igualmente al psicólogo que le gustaría ser más cariñosa con los demás fuera de la consulta. Es un motivo de consulta común en la terapia y él le puede ofrecer herramientas para conseguirlo.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Alicia
17 enero, 2017Muchas gracias por su respuesta. Me ayuda a reflexionar.
Hoy estuve en consulta. No he dicho nada pero a ver en las próximas semanas.
Un saludo.
Alicia
26 octubre, 2017Buenas tardes.
No sé si dejar la terapia. No sé cómo expresar a mi psicólogo, de la mejor manera, mi frustración al no verme capaz de cambiar mi actitud. Sé que ese es el problema, mi cambio de actitud, y me cuesta mucho. En consulta y cuando estoy con gente, a veces, estoy ilusionada con la vida pero al llegar a casa todo cambia. Salgo muy poco y ese es el problema. Necesito relacionarme más con la gente y no me veo con fuerzas. Esta semana, por ejemplo, mi tarea es llamar a una conocida. La conozco poco pero me he sentido bien cuando nos hemos visto, de ahí la propuesta de mi llamada. A pesar de todo, ya no me siento con fuerzas, me preocupa que esa persona realmente me conozca. Esto mismo ya pasó la semana anterior. ?Cómo le digo el martes en consulta que otra vez he fallado? Porque así me siento yo con él: me está ayudando, decidimos cosas que yo puedo hacer y después no hago.
De ahí mi duda en abandonar la terapia. Creo que no es problema del profesional sino mío. Me va a pasar con otra persona, simplemente no creo en mí.
Esto mismo no soy capaz de contárselo a él. Estoy en terapia hace ya un año y 9 meses ?cómo me voy a mostrar así de negativa?
Sobre pedirle orientación para ser más cariñosa con los demás creo que lo he hecho. Le he dicho "no sé cómo relacionarme con los demás, no sé cómo acercarme a ellos" creyendo que así me estoy explicando. Quizá no sea así. También le he dicho que necesito cariño y saber darlo, y tampoco sé si con eso me estoy haciendo entender. No sé, ya solo me falta mendigar amor
La verdad es que me cuesta mucho comunicarme. A pesar de todo con él me muestro ya más espontánea.
Pues eso, que no sé qué hacer.
Muchas gracias por leerme.
Saludos.
Beatriz Alonso Sánchez
2 noviembre, 2017Buenas tardes Alicia,
Para lo que expone en su comentario, quizá le sería más fácil, si no se ve capaz en este momento de expresarle estos pensamientos en persona, hacerlo por escrito. Explicar igual a través de una carta o email cómo se siente, qué dificultades está observando a la hora de realizar las tareas propuestas, etc. Este escrito le podría ayudar tanto para comunicarse con su terapeuta como para usarlo a modo de reflexión personal y poder indagar más en lo que está sucediendo.
Por otro lado, si ve que le cuesta llevar a la acción las tareas propuestas después de la terapia, una opción que suele funcionar es pensar en tareas más sencillas y alcanzables, para poco a poco proponerse realizar otras que requieran más dificultad para usted. No se trata tanto de dar grandes pasos, sino de que poco a poco vaya sintiéndose mejor, y esto se consigue con pequeños avances.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Alicia
2 noviembre, 2017Muchas gracias por escribirme. Me sirven de ayuda sus palabras.
Alicia
4 diciembre, 2017Hola Alicia, yo también me llamo Alicia y me siento identificada el algunas cosas que contás, pero te diría que con un terapeuta tenés que ser vos misma aunque te cueste porque sino la terapia no te va a servir. Yo cuando entro a la sesión es como que me desnudara, para mí tiene que ser así.
Suerte!
María Reyzábal
7 diciembre, 2017Muchas gracias Alicia por tu consejo. Efectivamente, con el psicólogo tenemos que ser sinceros para que la terapia funcione; lo has descrito perfectamente. Hay que atreverse a contarle al psicólogo lo que a veces nos da miedo decirle a los demás; pero esto es la clave para que pueda ayudarnos. Y esa sinceridad incluye el atrevernos a decirles cuando algo de la terapia, o de su manera de actuar, no nos está sirviendo o no nos gusta.
Esperamos que seais capaces ambas de mantener esta sinceridad.
Un saludo a las dos,
El equipo de Centro Psicología Bilbao.
Alicia
21 enero, 2018Muchas gracias por tu comentario. No lo había visto hasta ahora.
Alicia
21 enero, 2018Muchas gracias, Alicia, por tu comentario.
Alicia
18 febrero, 2018Hola Alicia! Me gustaría que pudieses explicarte un poco más cuando dices que se tiene que ser uno mismo. Yo creo que lo he sido pero siento que mi parte desesperanzada no gusta a mí psicólogo. Si es cierto que me siento así, cómo no lo voy a mostrar? Creo que si no, no puede saber cómo me siento y no podrá ayudarme. No sé si estoy equivocada. No se trata de ser negativa y quejarme.
El otro día me mostré. Estábamos hablando de las mismas cosas que sigo sin entender y ese no era el problema para mí sino que se hacía otra vez con los mismos ejemplos que no me ayudan a darme cuenta de lo que necesito darme cuenta.Sentía impotencia, e inútil seguir así. Le mostré está inquietud pero parece que no lo hice nada bien porque le sentó bastante mal. No lo expresó verbalmente pero lo vi claramente en su cara. Yo no quería ofenderle solo intentaba hablar lo que consideraba que no me hacía bien. Llevo 2 años en terapia y veo que hablar así una y otra vez no me ayuda a iniciar mi cambio.
Ahora me siento mal por creer que estropeo la relación que tenemos; aunque él me diga que no me preocupe.
Agradecería vuestra visión, Alicia y Beatriz.
Muchas gracias. Un saludo.
Beatriz Alonso Sánchez
22 febrero, 2018Buenos días,
Desde mi punto de vista, la primera persona que tiene que percibir que la terapia le ayuda es quien acude a ella. Si consideras que los ejemplos que pone o las herramientas que te da no te son útiles, es muy adecuado decírselo para enfocarse en buscar soluciones. No se trata de enfadarse, sino de comunicarse para solucionar el motivo que le lleva a consulta. Por todo ello, es adecuado que se exprese, y si ve en última instancia que no le convence el enfoque, cambie de terapeuta.
Un cordial saludo,
Alicia
22 enero, 2017Hola, buenos días.
Necesito una visión diferente a la mía, que me ayude a reflexionar, por eso le escribo. Quizá este sea un motivo para dejar la consulta de mi psicólogo. No lo sé.
Como dije antes, llevo en terapia un año. Me siento muy escuchada y comprendida. La dificultad viene porque hay algo que no conté, no vi esa necesidad en mí ni la ocasión para hacerlo. No conté que hace más de veinte años, ahora tengo 48, intenté el suicidio. Ahora que hay más intimidad en las conversaciones, que se ha hablado de más cosas, pienso si no estaré siendo deshonesta con él. No sé, que quizá no saber qué tipo de persona soy, lo que he sido capaz de hacer, impida también que pueda ayudarme.
Siento que lo decepcionaría como persona por sus creencias religiosas, si lo supiese. Que no podría volver a confiar en mí. Me siento como una mentirosa.
En fin, estoy en un mar de dudas: se lo digo o no se lo digo.
También las dudas porque el comienzo de la terapia no fue por depresión ni nada parecido sino por mi dificultad para relacionarme con los demás.
Muchas gracias por leerme.
Un saludo muy cordial.
Beatriz Alonso Sánchez
23 enero, 2017Buenas tardes Alicia,
Cuando acudimos a la consulta de un psicólogo lo hacemos por un motivo de consulta concreto (en general). Es posible que a medida que vamos trabajando, surjan nuevos motivos de consulta o el inicial vaya cambiando. Si usted considera que es importante que su psicólogo conozca este aspecto de su pasado, porque este aspecto le afecta en la actualidad, o porque es importante para buscar soluciones para el problema actual, le recomendamos que se lo haga saber. Si usted cree, por el contrario, que es un aspecto de su pasado que a día de hoy no tiene ninguna importancia y simplemente es algo en lo que pensó, pero ya no piensa más en ello, no es necesario comentarlo con él. Lo importante es que usted se sienta cómoda y, si lo decide, pueda hablar sin problemas de ese aspecto de su vida con su psicólogo. Él no debería juzgarla por ello (independientemente de sus ideas religiosas) ni usted debería sentirse como una "mentirosa". Hay veces en la vida que resulta complicado contar ciertas cosas. Es totalmente entendible y no se sienta juzgada por ello en absoluto. La consulta del psicólogo debe ser un espacio donde se sienta libre de poder comunicar lo que necesite, y también de no comunicarlo si usted cree que no tiene ninguna relación con su situación actual.
Esperamos le sirva de utilidad,
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Alicia
26 febrero, 2018Muchas gracias Beatriz por su respuesta del 22 de febrero de este año. Es que no me deja responder justo en ese comentario.
Un saludo.
Alicia
23 enero, 2017Sí, muy agradecida. Me siento con más capacidad para decidir.
Un cordial saludo.
Beatriz Alonso Sánchez
24 enero, 2017Estupendo Alicia!
Un saludo,
Lupita
8 febrero, 2017Hola buenas tardes!
Me ah gustado mucho su articulo y me gustaria saber su opinion, llevo un poco mas de 6 meses en terapia psicoanalitica, siento que me ah ayudado muchisimo eh notado cambios muy positivos en mi pensamiento. Sin embaargo ahora mismo tengo varias semanas en las que definitivamente ya no quiero asistir, siento que no hay mucho click con mi terapeuta, aveces la manera en la que me escucha para desesperarla y eh pensado que su personalidad es un poco controladora y eso me intimida mucho como paciente, el hecho de pensar que me pueda estar manipulando un poco. no es que quiera dejar de asistir a la terapia, pero ya no me siento comoda con ella, y sinceramente no sé como afrontarla, puedo decir que me da un poco de miedo, ya que se que me sentire un poco acosada cuando me diga que me quede. Y de igual manera me da miedo pensar que si se queda molesta conmigo pueda revelar detalles de mi vida que yo los platique en la terapia. Realmente nose como manejar o salir de esta situacion.
Beatriz Alonso Sánchez
9 febrero, 2017Buenos días,
El hecho de acudir a una terapia psicológica es algo que la propia persona que acude debe ver como necesario, gratificante, importante, etc. Si usted no se encuentra así y desea finalizar la terapia, tiene derecho a hacerlo. Además, el psicólogo está obligado a guardar secreto profesional sobre lo que se haya hablado dentro de la terapia, de forma que no debería revelar detalles privados de su vida.
Entendemos que dar el paso es una situación complicada. Lo ideal sería hacerlo en persona o por teléfono, pero en ocasiones si le resulta muy incómodo puede también hacerlo de forma escrita (por email, por ejemplo), indicando de esta manera cómo se siente y los motivos que le llevan a dejar la terapia.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Beatriz Nava
9 febrero, 2017¿Qué hacer en el caso contrario?
Yo soy psicoterapeuta y en ocasiones mis pacientes han dejado de asistir. Y como bien dice su artículo, me dejan confundida porque no se si el motivo de su inasistencia ha sido culpa mía. ¿Cómo manejar esa situación?
De antemano les agradezco su respuesta. Saludos
Beatriz Alonso Sánchez
13 febrero, 2017Buenos días Beatriz,
Cuando los pacientes dejan de asistir, tratamos de ponernos en contacto con ellos (a través del teléfono o por email) para conocer las causas de la baja. A veces se puede realizar a través de un cuestionario sencillo, con el objetivo único de saber (y no tanto de insistir para que continúen). Hay pacientes que contestan y otros que no, pero en ese último caso poco podemos hacer (aunque nos estaría dando también información si no cogen las llamadas ni contestan los emails).
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Jorge
28 febrero, 2017Hola. Tengo una duda. Mi psicologa quedó en avisarme cuando retomariamos la terapia luego de las vacaciones y ya han pasados dos meses y nada. No se bien que pensar,se que ella tiene otros trabajos pero siempre fue atenta conmigo. Me parece raro. Que consejo me daria? O le escribo yo?
Beatriz Alonso Sánchez
2 marzo, 2017Buenos días Jorge,
Si ella no se ha puesto en contacto, puede que haya sucedido algo o que haya perdido la forma de contacto y no le pueda localizar. Puede probar a escribirle o llamarle usted para retomar la terapia y salir de dudas.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
lucia
7 junio, 2017Me ha gustado mucho su artículo. Me gustaría compartir mi situación. hE realizado terapia durante varios años, tengo confianza en este proceso por los cambios tan positivos que he experimentado. Estoy pasando una crisis muy seria con mi marido y nos hemos planteado la separación. El propuso realizar una terapia pero después de solo dos sesiones ha faltado a la tercera y hace comentarios sobre su falta de utilidad y se plantea abandonar. Me preocupa mucho que tome esa decisión y no sé como actuar.
Beatriz Alonso Sánchez
8 junio, 2017Buenos días Lucía,
Entendemos la preocupación por el hecho de que abandone la terapia, pero también observamos en consulta que cuando una persona adulta quiere dejar de acudir, es contraproducente "obligarle" puesto que son tratamientos que requieren cambios personales y para eso es necesario tener actitud y ganas - confianza de querer cambiar la situación.
Podría hablar con su marido para saber cuáles eran sus expectativas de la terapia, qué pensaba que se podía conseguir en dos sesiones, qué es lo que le ha desilusionado... simplemente también tratar de comprender los motivos reales del abandono y buscar entre los dos otras alternativas para mejorar la relación de pareja.
Por último, nosotras siempre hablamos de que las personas tenemos nuestro propio metro cuadrado de actuación. Podemos actuar desde ese metro cuadrado, y decidir qué vamos a hacer nosotros/as, aunque no tengamos posibilidad de modificar lo que quiere hacer el resto. Una relación es cosa de dos, pero quizá haciendo cambios una parte, se modifican patrones en la relación.
Esperamos le haya sido de utilidad,
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
salva
10 julio, 2017Mi experiencia despues de 5 años de terapia es espantosa.
Preguntan y retuercen la realidad hasta hacer como que les has respondido lo que ellos esperaban, sea o no la realidad, y sin más pasan a anotarlo.
Al final se construyen ellos mismos un castillo de naipes sobre falsedades e inexactitudes que interpretan como tus hechos, vivencias, recuerdos y sentimientos.
Sobre esas falsedades te acusan de lo primero que se les pasa por la cabeza y lo retroalimentan.
La psicolgía no es una ciencia. Es brujería pero de la barata.
Beatriz Alonso Sánchez
14 julio, 2017Buenas tardes Salva,
Lamentamos que hayas tenido esa experiencia tras una terapia de cinco años.
Desde nuestro centro, entendemos que si una terapia no funciona, tanto el terapeuta como la persona que acude pueden valorar que eso no está funcionando, y en nuestro caso recomendamos finalizar con la terapia si vemos que no se está obteniendo ningún cambio tras varias sesiones (no vemos necesario ni ético esperar 5 años para finalizar la terapia), porque es fundamental tener honestidad. Lamentablemente, nos encontramos a veces con personas que no son profesionales y pueden llegar a buscar únicamente un beneficio económico.
Por el lado contrario, y afortunadamente, en otras ocasiones la terapia es un proceso que ayuda a la gente a encontrar formas de superar ciertas situaciones en la vida. Pero entendemos que si has vivido esa experiencia, puedas tener esa opinión.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Sofía Aréchiga
24 julio, 2017Yo abandoné la terapia luego de cinco meses. Lo hice porque creí que mi psicólogo no podía seguirme atendiendo o le resultaba complicado. Me canceló la sesión porque me dijo que buscaba trabajo (era un prestador de servicio por lo cual no recibía alguna remuneración económica), además de llegar tarde en ocasiones pasadas o faltar. A decir verdad no estaba segura de abandonar, no quería hacerlo, pero creí que era lo mejor.
Beatriz Alonso Sánchez
24 julio, 2017Gracias por compartir su experiencia Sofía.
Tristemente a veces nos podemos encontrar con estos casos en los que no se comprometen con el trabajo. Si continúa necesitando ayuda, le animamos a que busque a otro profesional con mayor disponibilidad e interés.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Clara
1 agosto, 2024A mi me pasa que deje de ir hace unos meses ya que no podía seguir pagando debido a una fuerte crisis económica que sufrí. Al principio le dije que volvería en unas dos semanas porque realmente pensé que así sería, pero el tiempo fue pasando y yo seguía sin poder pagar. Y sin poder ir al psiquiatra como ella me había recomendado. Sin embargo a penas pueda volver me gustaría hacerlo pero me da vergüenza volver a hablarle para agendar o algo por el estilo ya que ella debe pensar que solo me fui y ya aunque esa jamás fue mi intención. Aunque si es verdad que muchas cosas que me decía yo ya las había pensado mil veces y solo asentía. Nose que hacer ya que cualquier escenario posible me hace sentir incómoda y con miedo.
Clara
1 agosto, 2024Me equivoqué, no fue mi intención responder el otro comentario, si no hacer uno individual.
Daniel
16 agosto, 2017Hola, yo quisiera saber si puedo consultarles lo siguiente: a una amiga de trabajo le recomendé ir a terapia, al principio me dijo que todo iba bien, pero que en un determinado tiempo el terapeuta comenzó a cancelarle varias veces las citas. No hubo problema, sabe que él es un hombre ocupado y comprendió al principio, pero en los próximos días el terapeuta le agendaba cita para tal día y hora y resulta que la dejaba plantada, no una vez, sino cuatro o cinco veces en dos meses, mi amiga comenzó a sentirse mal, creía que estaba forzándolo a tratarla. Total llego un momento en el que ella se resignó a ya no ir con ese psicólogo, pero a la semana le habla para ver si pueden volver a retomar citas, ella muy contenta le dijo que si y quedaron para ese día… pero sorpresa que otra vez la vuelve a dejar plantada… yo la veo muy mal, dice que el terapeuta es muy bueno con su trabajo pero no le gusta que le haga esto. Me pregunto que debía hacer o si era correcto que pasara esto, yo me sincere y le dije que tal vez no le interesa su caso y si fuera ella, mejor ya no lo busco ni le contesto las llamadas y wats (que por cierto le ha estado mandando muchos disculpándose que no era su intención y bla bla) yo la veía muy bien al principio pero ahora cada vez la veo mal y me dijo que ya no quiere recibir ayuda.
Beatriz Alonso Sánchez
17 agosto, 2017Hola Daniel.
Por lo que comenta en su email, el terapeuta no se está tomando con seriedad su trabajo. No es correcto dejar a una persona plantada, menos aún si necesita ayuda y acude a la terapia con la intención de obtenerla. En casos como este, recomendamos abiertamente que cambie de terapeuta. Hay personas muy profesionales y muy éticas que no se plantearían hacer eso a nadie. Si fuese que no le interesa llevar el caso, debería decírselo, en lugar de no acudir a las sesiones. Es una pena que su amiga haya tomado la decisión de no querer recibir ayuda. Hable con ella, porque afortunadamente no todos/as los/as psicólogos/as actúan así.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Daniel
8 noviembre, 2017Hola Beatriz
Si intentaré hablar con ella, espero que busque a un terapeuta que realmente le interese llevar su caso. Verás me comenta que estaba en esa disyuntiva de abandonarlo o darle una oportunidad, es que ella habló con él y le dijo que iba a corregirse y que ya no la iba a dejar plantada. Así fue, pero ahora con su respuesta Beatriz, me convenzo de que a ese psicólogo no le interesa el caso de mi amiga. Verá ella me comentó esto que fue el 14 de octubre le manda mensaje diciéndole: "Estoy muy enfermo, no fui a mi trabajo bla bla ¿Podemos reagendar el día de mañana?" mi amiga accedió pero al llegar el día, se entero que el tipo se fue a una fiesta el día que le dijo que estaba enfermo (el psico la tenia agregada en el facebook y lo vio en unas fotos donde lo etiquetaron) y para colmo, le manda otro mensaje: "Con la novedad de que sigo en cama, ayer festeje con mi esposa pensando en no sentirme mal hoy sigo en cama no pude ni ir a dar clase... podemos reagendar?" ella me mostró los mensajes y las fotos en captura de pantalla la ultima vez que la vi. La verdad yo me siento mal y apenado por ser yo quien le recomendó buscar ayuda, aunque un peso menos es que no le dije que fuera con ese. Intentaré hablar con ella, un grupo de amigos y yo lo haremos. Gracias por su atención.
Violeta Hernández
26 agosto, 2017Hola. Hace un mes decidí comenzar ir a terapia, pues desde hace un año entré en depresión. Mi depresión comenzó por un sentimiento de soledad y confusión en el ámbito laboral.
Tengo una relación a distancia, y hace unos meses me comenzaron unos pensamientos obsesivos al respecto. Yo sé que lo quiero, esos pensamientos son un constante "dejalo, no te sentirás cómoda con él" tengo muchos miedos y todo esto me ha traído ansiedad. Llevo 5 sesiones en terapia cognitiva conductual, a veces me siento poco comprendida por la terapeuta. Dice que todos tenemos problemas, que no soy la única en esa situación. En ocasiones me habla mucho acerca de otros casos de personas, no dice nombres, pero habla de otros pacientes. Hace una semana me dijo que si iba a ver a mi novio, me cuidara porque sino me después estaría como todas las "traumada" que acuden a terapia por embarazos no deseados. Estas cuestiones no me han gustado. Cuando le hablo acerca de lo que me aqueja solo me dice, sí es que tienes esto o lo otro, y se centra en decir que es mi pensamiento negativo, que tengo que empezar a hablar en positivo. Eso es todo. No sé si seguir en la terapia. ¿Qué puedo hacer?
Beatriz Alonso Sánchez
29 agosto, 2017Buenos días Violeta,
Desde Centro Psicología Bilbao entendemos el papel del psicólogo como la persona que acompaña a quien acude a terapia en la búsqueda de soluciones ante una situación concreta. Por ello, es importante que más que sentirte juzgada, sientas que acudiendo a terapia puedes ver las cosas de una manera que te ayude, que aprendas o conozcas herramientas para sentirte mejor, etc. Un ejemplo podría ser que mediante la terapia aprendieras a identificar los pensamientos negativos que puedas tener y a pasarlos a pensamientos positivos. Sólo con saber que algo es negativo no ayuda. Ayuda tener herramientas de cómo detectarlo y cómo sustituirlo por algo que le haga sentir bien o, al menos, mejor.
Abandonar la terapia o no hacerlo es una decisión muy personal, pero si finalmente decide hacerlo, le recomendamos que busque otro terapeuta con el que sienta que existe mejor vínculo terapéutico, en lugar de abandonar el proceso de terapia definitivamente.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Alfonso Rodríguez
24 septiembre, 2017Buenas noches,
El artículo me ha parecido muy interesante. Llevo en terapia un largo período de tiempo, pues hablo de 10 años y lo que era inicialmente un motivo puntual ha derivado en una transición a aspectos más amplios de mi vida.
Sin embargo, en algunos momentos me he sentido ninguneado por mi terapeuta, ya que sabe que tengo un problema médico que me consume bastantes hotas al mes y parece que le resulta indiferente. En terapia se ha mantenido en una postura muy distante, lo que inicialmente me había parecido bien, pero si, como ha sucedido, experimento una crisis de pánico en consulta creo que porque me toque no vamos a malinterpretar ninguno de los dos la situaciòn; casi molesta ese distanciamiento que una palmada.
Lo que ha desbordado el vaso, y me lleva a plantearme dejar la terapia es que tras la visita del día 2 de los corrientes aún ignoro la fecha y hora en que me puede atender. Yo ya cojo las visitas del tema médico al que hacía referencia, pero parece como si buscase una excusa para quitarme de la agenda de pacientes.
Creía que era buena profesional, pues de hecho es profesora en una facultad de la ciudad donde resido, pero constato que hay pacientes a los que mima, cuida y agasaja y a mí me trata como al novio que se quiere quitar de encima.
Agradecería un consejo, pues mis problemas de base no son precisamente los que favorecen las soluciones mesuradas.
Gracias
Beatriz Alonso Sánchez
25 septiembre, 2017Buenos días Alfonso,
Después de tanto tiempo en terapia, nuestra recomendación es que hable con su psicóloga personalmente y le exponga cómo se siente y lo que le hace sentir así. Quizá haya una explicación que le haga entender mejor la situación o se pueda aclarar de alguna manera, pero sería recomendable conocer también su punto de vista.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Alfonso Rodríguez
25 septiembre, 2017Buenas tardes Beatriz,
La mayor dificultad es la de acceder la terapeuta, ya que no salgo de la visita con otra programada, sino que es un "te llamamos y te programo nueva visita", algo que puede ser al cabo de un mes o de medio año.
En sesión no acepta salirse del guión que trae establecido, y de hecho hay temas que no desea tratar: mi enfermedad,sexualidad o educación de hijos.... que fueron los temas por los que empecé a ir a sus sesiones.
Solo se puede acceder a esta terapeuta por medio de una secretaria que considero filtra en exceso los mensajes. He comentado esta problemática con la esposa de
un amigo, que es perito psicólogo y me indica que todo parece indicar que se comporta como si mi caso le hubiese hastiado.
A ciencia cierta, lo que sé ahora mismo es que no albergo confianza en terapias congnitivas, conductistas o dialécticas. No sé si es una casualidad o una práctica generalizada, pero despreciar a un paciente/cliente es algo que en otros campos profesionales no había visto. ¡Es que en 10 años ni me ha estrechado la mano!
Intentaré una confrontación en vivo y en directo.
Gracias por tus consejos
Lizbeth Morales
3 noviembre, 2017Hola, me gustaria saber su opinion. Llevo asistiendo a terapia 6 meses y he notado muchas mejorias, pero recien alguien de mi familia decidio iniciar su terapia con mi mismo psicologo cosa que no me agrada, me incomoda, no me siento en confianza y ya no quiero continuar mi terapia, siendo consciente tambien de como me puede afectar, me preocupa pero siento que ya no puedo confiar. Y no se como decirselo
Beatriz Alonso Sánchez
3 noviembre, 2017Buenos días Lizbeth,
Los psicólogos tenemos un código deontológico que nos obliga a ser discretos y no poder hablar de una persona delante de otro paciente (confidencialidad). Por ello, en principio su psicólogo no debería rebelar ninguna información de la que se haya hablado dentro de la terapia y debería existir confianza.
Sin embargo, si aún así usted no se siente cómoda con la situación, le puede indicar qué cosas le preocupan y tratar de buscar conjuntamente una solución. Igual puede derivar al otro paciente a otro psicólogo o recomendarle a usted a algún terapeuta.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Maria
11 noviembre, 2017Buenos días, os comento mi caso.
Llevo mucho tiempo en terapia, hablamos de años.
Empecé por un problema puntual, de no saber como enfocar mi vida, que camino tomar y unido a una pérdida de amistades.
En general me ayudó bastante a saber encauzar mi vida, sobretodo en el primer ámbito comentado.
Fuí bastantes años muy agusto y notando que me ayudaba, que avanzaba.
De pronto sentí como un click y me di cuenta que quizás ya no necesitaba ir mas, de ésto hace como unos tres años.
Se lo comenté pero me dijo que no, que todavía no me veía fuerte del todo.
Bueno, seguí yendo.
No quiero entrar en mucho detalle, pero el año pasado me ocurrieron una serie de cosas en el trabajo y en otras facetas de mi vida, que me crearon mucho estrés, y sinceramente, no sentí que la psicóloga estuviera ahí para nada.
Yo no podía ir a consulta de lunes a jueves, me resultaba muy difícil ir por los problemas de estrés que tenía, temas de trabajo, y ella no fue capaz de ponerme cita un viernes, ya que los viernes no trabaja.
Y cosas tipo así. Nunca la llamo, pero un día tenía una duda muy grande y no sabía que hacer, la llamé y me cortó rápido encima diciendo, no te preocupes por esas tonterías, cuando he ido años y nunca la he llamado, como mínimo tomarme en serio, porque aunque hacia fuera podía parecer una tontería, cualquier error que cometiera en ese momento me podía hacer perder algo importante para mi.
En resumen, no me sentí nada valorada.
Aparte mas de una vez la noté perdida respecto a mi, incluso cuando le pregunté que cuando me iba a dar el alta me dijo que bueno, quizás debería ir siempre (eso me lo dijo hace como medio año, cuando yo estaba inmersa en problemas), pero en cambio hace dos años o así me dijo que me veía mucha mejoría y ya en poco tiempo me daría el alta.
Quisiera saber su opinión, yo pienso ya de hace tiempo que podría volar sola, ya siento que no me ayuda. Pero me gustaría que saliera de ella, que me dijera, te veo bastante bien para que no sigas viniendo, al menos temporalmente para que te pruebes.
En ese sentido me siento bastante decepcionada, ya que una nunca está segura de cuando es el momento de dejar la terapia y claro, si no te lo ponen fácil siempre piensas si quizás tiene razón.
Espero su consejo, muchas gracias
María Reyzábal
21 noviembre, 2017Buenos días María;
Entendemos que, mientras sentías que aprendías con la terapia y te resultaba provechosa, acudías allí de buen grado. Es lógico que, conforme hayas ido viéndote fuerte y avanzando hayas sentido que necesitabas menos la ayuda de tu psicóloga ; y de hecho, su tarea consiste en que, poco a poco, puedas aprender a estar bien sin necesidad de ella. Nos llama la atención la actitud que describes, pues si no te sientes valorada por ella ni apoyada cuando le cuentas algo que para tí es importante, ¿qué ganas con la terapia?
La relación terapéutica se basa en la confianza; y mientras sientas que vas por obligación y que ella no está ahí para tí, la terapia no será efectiva, pues estás teniendo la sensación de "ir por ir", sin saber por qué.
Podría ser conveniente que dijeses a tu psicóloga cómo te sientes con respecto a la terapia y con respecto a la relación paciente-terapeuta. Además, podrías pedirle que cuantificase los cambios y los avances que has hecho desde que estás trabajando con ella: lo que has conseguido hasta el momento y lo que cree que todavía te falta. Que te diga claramente: ¿Cómo sabrás que estás lista para dejar de acudir a terapia? ¿Qué tienes que lograr antes de estar lista? E ir revisando esto en las sesiones.
marcela
9 diciembre, 2017hola, os comento mi situacion
llevo dos años y medio haciendo terapia. siento que en muchos aspectos me ha ayudado y lo agradezco.pero ya hace un tiempo que siento que no hay avance, que mi psicologo me dio todas las herramientas que él me puede dar. y que desde ya necesito otro enfoque.
ya tomé la desición de abandonar y empezar con otro profesional. lo que me preocupa es como comunicarselo sin dañar su autoestima o sentimientos, porque ademas lo aprecio y sé que él también.
quisiera saber cómo actuar sin que sea una fea situacion y que él lo entienda de la mejor manera.
desde ya,muchas gracias
centro-psicologia
10 diciembre, 2017Estimada Marcela,
Entendemos cómo te sientes porque parece que después del tiempo, hay un vínculo muy fuerte y lo sientes casi como a un amigo. Puedes estas bien segura de que el terapeuta no va a sentir dañada su autoestima, porque en primer lugar sabe perfectamente que te ha ayudado durante mucho tiempo, y no tengo ninguna duda de que también sabrá que tu evolución ahora mismo está un poco en standby.
Es algo que puede pasar, y más cuando la persona lleva mucho tiempo en terapia. Esto, los terapeutas lo sabemos. Lo importante es que seas sincera con él, para quedarte tranquila. La idea de que necesitas otro enfoque para seguir mejorando, es algo que va a entender perfectamente. Sé honesta con él, dile todo lo que te ha ayudado y que ahora estás en una fase de no avance, y por eso has decidido dejar la terapia. No dejes ninguna puerta cerrada porque puede pasar que al cabo del tiempo, quieras volver donde esta persona. Cuando las terapias son largas, también suele ser bueno dejar reposar un poco el trabajo, o quizá, en tu caso cambiar de enfoque.
El terapeuta lo tiene que entender y su autoestima no debería verse dañada para nada, además después de dos años, te conoce muy bien y sabe que ahora tú no estás satisfecha con lo que estáis trabando.
Ánimo y mucha suerte con el proceso de mejoría.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Arnulba
11 diciembre, 2017Buenas tardes,
Gracias por el artículo, hay partes de él en las que me he sentido identificado.
Mi caso es que llevo 10 años, desde mi adolescencia, asistiendo prácticamente al mismo psicólogo. Durante 5 años me trató en un centro público para niños y adolescentes y al cumplir la mayoría de edad, tras un breve paso por un centro público de adultos, comencé las visitas en su consulta privada. Desde entonces acudo 2 veces al mes cada 15 días. En tanto tiempo he vivido muchas cosas y superado otras tantas, especialmente unos problemas de ansiedad y de transtorno obsesivo que tenía y que ya prácticamente no se manifiestan. Entre nosotros se han forjado una confianza y aprecio importantes y le estoy muy agradecido por toda la ayuda recibida.
Aunque creo que aún hay pequeños aspectos de mi vida que necesito mejorar, hace tiempo que me encuentro en una fase emocionalmente más estable y a menudo siento que en las visitas no tengo nada nuevo que contar y que éstas son menos productivas de lo que deberían ser, por ello, sin necesidad de abandonarlo radicalmente, me gustaría espaciarlas más, al menos para probar qué tal me va. En alguna ocasión pasada se lo he propuesto y él me ha respondido: "si es por el dinero no te preocupes, sabes que no hay problema en que me lo pagues cuando puedas" o "el problema de vernos solo una vez al mes es que habría demasiados temas para abarcar en una sola visita". Por otro lado, si hay algun mes que por vacaciones u otras cuestiones no puedo asistir con la misma frecuencia, después él trata de recuperar las visitas perdidas proponiendo fechas menos espaciadas.
Así pues, he dejado pasar el tiempo y cada vez me cuesta más comunicarle mi decisión por temor a cómo se lo pueda tomar y me gustaría ser capaz de expresarsela de manera que pueda entenderla lo mejor posible.
Muchas gracias.
María Reyzábal
11 diciembre, 2017Buenas tardes Arnulba;
Muchas gracias por tu comentario. En tu caso, entendemos que llevas tanto tiempo en terapia con tu psicólogo, y siendo ayudado por él, que te cuesta mucho comunicarle tu decisión de intentar avanzar por tu cuenta, prescindiendo de la terapia. Por lo que nosotros vemos en el centro, cuando las sesiones dejan de ser productivas y sentimos que no tenemos nada que contar al psicólogo, es un indicador de que hay que espaciar las sesiones o bien interrumpir la terapia (para dar el alta, si corresponde). Esto suele observarse desde ambas partes: lo percibe el paciente y lo percibe, también, el psicólogo.
Entendemos que te sientes mal por él, sin embargo, ahora mismo está actuando de una manera con la que no estás de acuerdo. Si vas a terapia forzado o sin nada que contar, entonces es tiempo perdido para ambos. Pensamos que, por difícil que te resulte, deberías hablarle de cómo te sientes con respecto a la frecuencia de las sesiones. Si quieres suavizarlo, te recomendamos que le recuerdes lo mucho que te ha ayudado; pero, en última instancia, te animamos a mantenerte firme en tu decisión. En este mensaje que nos has escrito has expresado perfectamente, creemos, los puntos que podrías exponer: Que te sientes más estable, que sientes que las sesiones son menos productivas por no tener novedades para contarle, que no ves sentido a "recuperar las visitas" cuando te vas de vacaciones, etc...
Te recordamos también que en ultima instancia, tú eres el que decide acudir a terapia: tu psicólogo no puede obligarte a ir. Puede que, si no tienes esta conversación a día de hoy, más adelante decidas dejar de ir sin darle más explicaciones, y sería una lástima que vuestra relación terapéutica terminase así, después de tantos años. Esto es algo que también puedes comentarle, si lo consideras.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Nina
13 diciembre, 2017Buenos días,
Llevo 2 años y medio en terapia, siendo un camino muy difícil para mi, sigo siendo incapaz de verbalizar, me quedo muda, contestando a veces un si o un no con la cabeza, o una palabra suelta o número en un papel. El problema no viene para nada de la psicóloga, sino que son miedos míos a afrontar lo q llevo dentro. Pero ha pasado algo en la última sesión que me da miedo a que pueda interrumpir la terapia ella. Lo que ha pasado en la última sesión es que se ha puesto a llorar ella por una reacción mía de miedo viendo los temblores de su brazo. Verla llorar me ha impactado muchísimo, y ese miedo a que pudiera ella interrumpir la terapia es muy grande.
Gracias por leerme.
Saludos
María Reyzábal
13 diciembre, 2017Buenas tardes Nina;
Gracias por tu comentario. Entendemos que te haya sorprendido e impactado esa reacción por parte de tu psicóloga, y pensamos que para ella sería importante saber cómo te has sentido ante su reacción, así como tus temores a que ella pueda decidir dejar de trabajar contigo en terapia. Si te cuesta expresárselo verbalmente, te animamos a hacerlo por escrito, ya que en este comentario has sido capaz de comunicarlo de una manera en la que ella entendería cómo te sientes con su actuación, sin en ningún caso ofenderse con ello. Por otra parte, puede haber más personas que tengan esta reacción al ver a alguien muy asustado por sus gestos, nos podemos sentir culpables si vemos que, de manera no intencionada, hemos causado miedo a otra persona (sobre todo si se trata de una persona a la que estamos intentando ayudar); y podría ser una buena oportunidad para trabajar, en terapia, cómo se comportan tus personas cercanas cuando tú tienes miedo. El que hayas visto esta reacción en un entorno controlado, como es la terapia, puede ser valioso para reflexionar y trabajar a partir de ello.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicologia Bilbao
Nina
19 diciembre, 2017Gracias por su respuesta.
La escribi sobre ello, no me sale nada verbalmente, es muy frustrante, pero por lo menos consigo comunicar algo así.
La siguiente sesión la ha empezado directamente con ese tema, y me ha tranquilizado bastante. Me ha explicado que ha llorado por su propia tristeza por una enfermedad que tiene, aunque yo no dejo de sentirme culpable por provocarselo al asustarme.
No he sido capaz de abordar el tema de mi temor a que puediera ella dejar de querer trabajar conmigo, pero ya la siguiente sesión ha sido de mucho alivio.
Gracias
María Reyzábal
20 diciembre, 2017Buenas tardes Nina;
Nos alegramos de que hayas podido tomar la iniciativa de contarle, por escrito, lo que sentías. Así habéis podido aclarar lo que realmente había pasado, y reanudar la terapia sintiéndoos ambas mejor.
Enhorabuena por haber dado ese paso. Esperamos que en adelante te resulte más fácil poder decirle cómo te sientes, si se vuelve a dar una situación parecida.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Valentina
14 diciembre, 2017Buenas! Compartiré mi historia. Hace aproximadamente 4 años empecé a asistir a consulta psicológica, por primera vez en mi vida y fue espantoso! Yo salía muy mal del las consultas y la verdad sentía que en vez de ayudarme me estab empeorando (iba dos veces por semana por mas o menos 2 meses) ... entonces decidí dejar de asistir. Mi psicólogo nunca me contacto, por lo tanto asumo que no me importaría mucho que yo haya abandonado la terapia. En fin, hace poco menos de dos meses empecé a asistir con otra psicóloga y me esta yendo muy bien!
Virginia Rodrigo del Solar
14 diciembre, 2017Hola Valentina,
Muchas gracias por compartir tu experiencia!
Nos alegramos de que ahora hayas encontrado una consulta en la que te encuentres bien y que sientas que te están ayudando. Sinceramente... Demasiado aguantaste en la otra! Porque es normal que ALGUNA VEZ, una terapia te remueva un poco, pero LO HABITUAL, es que se salga bien de las consultas, desde luego mejor de lo que se ha entrado. Nosotros lo entendemos así, para eso se va a terapia, para mejorar y no salir frustrado cada vez que tienes sesión.
Te deseamos que sigas contenta y que evoluciones favorablemente en el problema que te ha llevado a consulta,
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
anónima
2 enero, 2018Hola, después de 9 meses de ir con una psicóloga estoy pensando en buscar otro profesional con el cuál asistir. Con ella hice muchos avances, aunque en varias ocasiones no me sentí cómoda con sus comentarios pensé que eran cosas sobre mí de las cuales yo aún no estaba consiente y con el tiempo lo vería. Creo que el error fue no dar importancia a que ella es la madre de uno de mis mejores amigos. Así fue como la conocí, en una crisis que tuve le llamé a mi amigo y su mamá que estaba con él, le dijo que la llevara a verme. Seguí tomando terapia con ella pues nunca se involucró a mi amigo en las sesiones o ella como su mamá. Hasta ayer que mi amigo me invitó a pasar el año nuevo con su familia y todo estuvo bien, aunque el comportamiento raro de la psicóloga. A parte de eso en la noche ella insistió en prestarme zapatos, a la mañana siguiente insistió en regalarme un pantalón que ya no le quedaba a su hija, "se lo íbamos a dar a la señora de la basura pero mejor llévatelo tu si te queda". Yo no tengo muchos recursos pero no quería aceptar los regalos, pero lo hice por la insistencia de ella. Aunque en la sesión anterior ella me había dicho que debía aprender a decir no. Por la mañana del nuevo año su hijo me invitó a quedarme a la comida y yo acepté, como nos agarró la noche él se ofreció a llevarme a mi casa, es 1 hora en automóvil por lo que yo le dije que no se molestara y que tomaría algún taxi, pero él dijo que de verdad no tenía inconveniente así que acepté. Todo había salido bien pero al llegar a mi casa me llegaron mensajes de la mamá de mi amigo, siempre me había escrito ella en su papel de psicóloga. Pero esta vez fue reclamando que debía pagarle la gasolina a su hijo, que había sido mi decisión quedarme a la comida y que si su hijo me importaba entonces yo no le iba a decir nada de eso a su hijo, ella no lo haría. Esto me desconcertó mucho y solo le pude responder disculpándome por las molestias que les hubiera causado y agradeciendo su amabilidad como anfitriona la noche anterior. Pero me volvió a escribir reclamando que yo me había llevado sus zapatos, que solo eran prestados y no regalados. Esto me molestó y me hirió porque yo no me los había llevado, los había dejado en el cuarto en el que me ofrecieron para dormir. Al inicio ella me había escrito que lo de la gasolina no tenía que ver con el dinero, ni menos porque mi amigo fuera su hijo, por lo que pensé que se trataba de un problema mío mental, tal vez yo sin darme cuenta lo estaba molestando. Pero después me escribió que no era por el dinero, pero que yo debía entender que se trataba de su hijo y que además él no había podido dormir mucho etcétera. Me alarman las cosas que me dijo y varios comentarios que me hizo al estar conviviendo yo esa noche con su familia, creo que ella ya mezcló las cosas y es imposible para mí que vaya a terapia con ella, además de que tengo miedo de que trate de poner a mi amigo en mi contra. Por esta razón creo que primero hablaré con mi amigo a escondidas de ella para informarle mis razones y luego le diré a ella que no seguiré yendo.
María Reyzábal
3 enero, 2018Buenos días;
Entendemos que los límites de la terapia deben estar bien definidos, y que pudiste sentirte incómoda ante sus regalos y atenciones. Estas conductas, que exceden de su papel como psicóloga, deterioran el vínculo que se establece durante la terapia y su efectividad. Los límites pueden ser más difíciles de mantener si conocemos previamente a nuestra terapeuta, como era tu caso, ya que es la madre de tu amigo. Entendemos tu temor a que todo esto pueda dañar la relación con tu amigo, y te animamos a hablar con ambos, tal como has decidido.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Cecilia
21 enero, 2018Hola, hace 3 meses deje de ir a terapia porque mi psicólogo siempre estaba corto de tiempo y a veces me cancelada las sesiones, si bien siempre me daba nuevas fechas no me gustaba mucho que todo el tiempo me cambie el día o el horario. La ultima vez que fui me había dado el turno y cuando golpeo la puerta del consultorio me atiende el portero y me dice que él ya no atiende más ahí. Le mando un mensaje a mi psicólogo desconsertada y le preguntándo si me iba atender y me dice que no era ese día el turno. Que él no lo tenía anotado en su agenda y sin embargo tenia en mis manos el papel con la fecha que el me dio. Esta claro que fue un error como lo pueden tener todos y me dijo para pasar el turno otro día y le dije que le iba avisar. No le volví hablar y él tampoco me dio un turno nuevo.
Me arrepiento de haber dejado la terapia porque me sentía bien, cómoda y estábamos avanzando mucho pero me molestaba el hecho de que me cancelada las sesiones o me cambiaba las fechas y horarios y esa última vez que me hizo ir en vano a consulta hizo que tome esa decisión apresurada, guiada por el enojo.
Pero ahora estoy pensando en volver a reiniciar la terapia con ese psicólogo pero no se si seria lo correcto o tendría que empezar terapia con un nuevo analista?
Virginia Rodrigo del Solar
22 enero, 2018Estimada Cecilia,
Si crees que has actuado un poco precipitadamente, te apetece este terapeuta, y además te arrepientes de haber dejado la terapia, podrías volver con él, pero desde mi punto de vista, le tendrías que comentar que hay cosas con las que no estás de acuerdo, como por ejemplo los cambios de fechas de las sesiones. El paciente tiene que ser formal y cumplir con los horarios, pero el terapeuta también; y es lógico que te molestes ante tanto cambio, y sin explicaciones. Por otro lado, el sentirse ignorada cuando no se te comunicó el cambio de despacho, también es algo que puedes comentarle porque es importante que él sepa cómo piensas. Además, es un buen ejercicio de asertividad y confianza con él. Creo que no te vas a sentir cómoda si no le comunicas lo que no te gusta y es probable que siga pasando. Ten en cuenta, que diciendo las cosas bien, se puede decir casi todo, y más cuando hablamos de terapia. Como dices, estás avanzando y has hecho ya un importante recorrido con él, así que ánimo. Sería una pena tenerlo que dejar más adelante, pero siempre sabrás que lo has intentado y no te tendrás que arrepentir por nada.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Sabri
22 enero, 2018Que excelente artículo. Felicidades!
Virginia Rodrigo del Solar
22 enero, 2018Muchas gracias Sabri!
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Carolina
23 enero, 2018Gracias por el artículo. Leí el mismo debido a que comence terapia a hace muy poco (cognitivo-conductual) y para ser sincera no me satisface la analista, por citar un solo ejemplo, vengo de una historia familiar bastante fuerte y ya en la cuarta sesion, conociendo todavía poco de mi persona, me planteó que en un futuro tengo que pensar en perdonar a mi entorno familiar ya que ella como analista y como persona considera fundamental el vínculo con la familia, “porque la familia es la familia” (textuales palabras). No veo bien, corríjanme si estoy equivocada, que un psicologo diga lo que tiene que pensar o sentir un paciente, pienso que tiene que ayudar a enfrentar los traumas y luego es el paciente, ya fortalecido, el que decide lo que es válido para él. A esto se suman interrupciones del tipo “salió el sol”, por ejemplo, que en mitad de lo que estoy expresando, lo único que logran es cortar el relato de lo que esoy expresando y perder el hilo. La profesional es cálida, no quisiera herir sus sentimientos, pero hay algo que no me termina de cerrar y no me hace sentir cómoda, a eso se le suma el coste de la sesión que es bastante importante para mis ingresos. ¿Es conveniente en un caso así abandonar la terapia avisando por vía telefónica ya que fue poco el tiempo transcurrido?, la verdad no sé muy bien como manejarme, dada mi vulnerablilidad en estos momento tengo temor de que en un encuentro cara a cara más prolongado que el telefónico me trate de “convencer” de continuar y no me permita soltarme con facilidad, como así también no tengo ganas de abonar por un servicio que considero no me está sirviendo. Me gustaría saber vuestra opinión. Gracias y saludos.
María Reyzábal
23 enero, 2018Buenas tardes Carolina;
Muchas gracias por tu comentario. Se entiende que para que la terapia sea efectiva, durante las primeras sesiones ha de formarse un vínculo terapéutico, que se crea a través de la confianza y la escucha. Entendemos que en vuestro caso ese vínculo no se ha creado pues, a pesar de las pocas sesiones que lleváis, ya ha hecho comentarios que no te han gustados y que has visto como intrusivos.
El psicólogo no debe juzgar. Debe entender tu mundo y dejar de lado su ego (Egoless), y tu terapeuta, con ese comentario de la familia, ha llevado la terapia a su terreno, a su manera de pensar. Entendemos que las interrupciones tampoco te hacen sentir cómoda, y que te molestan.
Por muy cálida que sea tu psicóloga, entendemos que sería conveniente que te sincerases con ella, pensando que no criticas a ella como persona, sino su manera de hacer terapia; que para otras personas será muy válida y eficaz, pero que a tí no te está sirviendo. Mereces sentirte ayudada por una terapia que, para tí sea efectiva y con la que te sientas cómoda; y ella, por su parte, merece un feedback de por qué no estás tan a gusto como deberías, o de por qué te vas.
Un saludo,
El equipo de Centro Psicología Bilbao
Carolina
23 enero, 2018Gracias María por la pronta respuesta.
Lucía
12 febrero, 2018Hola.
Me afecta pensar que un amigo/a haga terapia con la misma terapeuta que yo. Incluso eso sucedió y me cuesta aceptarlo, me angustia. Mi pregunta es si es normal y por qué un pasciente podria sentir esto que siento.
Beatriz Alonso Sánchez
12 febrero, 2018Buenos días Lucía,
Puede haber numerosos motivos por los cuales no te gusta que un amigo/a haga terapia con tu misma terapeuta. En ese caso, lo importante es que, por un lado, confíes en que se respeta la confidencialidad, y todo lo que hables con ella en terapia sea privado. Y por otro lado, si realmente te afecta, valores la posibilidad de comunicárselo o que pueda haber un cambio de terapeuta. Nuestra recomendación es enfocarse en posibles soluciones para estar cómoda dentro de la terapia.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Julia
22 febrero, 2018Hola,
Os agradezco compartir este artículo y otras opiniones.
Mi caso es diferente a los que he leído. Estoy muy contenta con mi psicóloga, llevo 4 años en consulta con 2 sesiones por semana. He tenido una evolución brutal, ya he definido mi espacio, autoestima, control de emociones...
Siento que es el momento de dejar la terapia, pero no sé cómo plantearlo. Me imagino que siempre se puede mejorar si sigo yendo a consulta, pero yo estoy contenta así. Debería esperar a que la psicóloga “me dé el alta”?
Gracias
Beatriz Alonso Sánchez
22 febrero, 2018Buenos días Julia,
Desde nuestro punto de vista, 2 sesiones por semana para trabajar en terapia es una terapia muy intensiva. Generalmente, la tendencia es la de ir reduciendo las sesiones (por ejemplo, a una a la semana, o quincenal, mensual...) hasta que finalmente cuando la persona siente que ya no necesita, pues dar el alta.
Después de 4 años y una terapia intensiva, vemos lógico que habiendo además mejora, se busque dejar de asistir a terapia. La idean no es tanto "abandonar" sino como bien dices "dar el alta". En ese caso, te animamos a que le plantees tus percepciones (que ya sientes que tienes las riendas de tu vida y que ves mucha evolución), para barajar la posibilidad de espaciar las sesiones en el tiempo o de volver a contactar cuando lo consideres necesario.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Natalia
24 febrero, 2018Hola. . Hace 10 meses que voy a terapia por muchos problemas tengo 2 sesiones por semana . . Yo estoy pensando en dejar a mi psicologo porque me enamore de el hace 5 meses y pienso en su mirada todo el dia obvio que trabajo y que me ocupo de mis cosas . . Cuando me di cuenta que ocupaba un lugar en mis pensamientos averigue sobre el tema . .y supe que es transferencia y que tengo neurosis y q tambien una resistencia a la cura . . Cada vez que lo veo siento que me enamoro mas mi corazon late fuerte . Aunque se que es algo imposible,un psicologo jamas se enamoraria de una paciente y mucho menos de mi. . Yo le explique lo que siento y tenia miedo que me derive a otro psicologo y me dijo que no me iba a abandonar en este proceso . . Aveces siento que no quiero ir mas. . Pero tampoco puedo dejarlo asi. . El me ayudo mucho. . Pero tendria que hablar con el y cambiar de psicologo?
Beatriz Alonso Sánchez
26 febrero, 2018Buenos días Natalia,
Nuestra recomendación es realizar la terapia con un terapeuta sin que existan factores que puedan intervenir negativamente, y consideramos que estar enamorada del psicólogo es uno de ellos. Por lo tanto, sería recomendable cambiar de psicólogo para evitar que la terapia se vea afectada por esta situación.
Un cordial saludo,
Centro Psicología Bilbao
Natalia
26 febrero, 2018Hola muchas gracias por responder. . Yo le dije a el que me siento enamorada y ya con la mirada me delato sola . . Porque el no me deriva ? Hay alguna forma de salir de salir de esta transferencia ?
Natalia
26 febrero, 2018Pero yo le cuento todas mis cosas sin ningun problema no me guardo nada . . Yo se que este enamoramiento es pasajero e irreal. Y si el viera que se ve afectada la terapia ya me hubiera derivado no? El es el profesional y confio en el
Alejando
25 agosto, 2022Para mí es imposible sentirme cómodo ya que no confío en los demás, pero si encima me juzgan, encuentro actitudes prepotentes, se hacen comentarios sobre mí que el psicologo no tiene que hacer, se burlan de mí y de mis creencias apaga y vámonos. Y no me digáis que eso no ocurre porque sí pasa. Sobre todo en la Gestalt.
Beatriz Alonso Sánchez
25 agosto, 2022Hola Alejandro,
Lamentablemente esto que señalas sí sucede en ocasiones. Nosotras no trabajamos desde este enfoque que comentas (gestalt), pero sabemos que hay psicólogos que juzgan, aunque también trabajamos por evitar eso. Sentimos que hayas tenido esta experiencia en terapia con otros profesionales y esperamos que puedas encontrar mejores experiencias en el futuro.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao
Angeles
7 noviembre, 2023Hola, me gusto su artículo. Llevo 3 años de terapia con mi psicóloga. Y siento muchas veces que me juzga y debido a eso en muchos casos no le cuento o no expongo por miedo a ese juicio suyo que me hace sentir confundida. Entonces seleccionó lo que está fuera de ese radio, pero siento que estoy dejando de lado procesos de mi vida que no puedo compartir con ella. Y ya no me está siendo de agrado tener que pasar por eso.. que me aconseja ? Muchas gracias por leerme, saludos !
Beatriz Alonso Sánchez
9 noviembre, 2023Buenos días,
En un proceso de terapia es importante que te sientas lo suficientemente segura (y no juzgada) para poder hablar con sinceridad y avanzar en la terapia. Si no te sientes así, puedes compartir tu sentimiento con tu psicóloga para buscar una situación al problema y si no te ves capaz de comentarlo en terapia, en ese caso es preferible que busques un cambio de terapeuta para seguir avanzando.
Un cordial saludo,
Equipo de Centro Psicología Bilbao