Hoy estamos de celebración de cumpleaños en Centro Psicología Bilbao y, como viene siendo habitual, no puede faltar un postre dulce para compartir entre todas las compañeras. En concreto, hoy le ha tocado el turno al Brownie casero J con nueces y… ¡CHOCOLATE!
Entonces aquí nos planteamos como psicólogas: ¿cómo nos puede gustar tanto el chocolate? ¿seremos adictas a él? Y ya que nos gusta tanto, ¿qué beneficios tiene desde el punto de vista de la psicología? Así que nos hemos puesto manos a la obra y esto es lo que hemos encontrado sobre la adicción al chocolate.
1. Efectos a corto plazo
Una de las ventajas del consumo de chocolate es que, al poco de comerlo, se manifiestan sus efectos en nuestro organismo. Es algo así como acción-reacción. Esto hace que sea un alimento “adictivo” y que, en general, las personas tendamos o nos encantaría (aunque nos controlemos) abusar de él.
2. Estimula hormonas de la tranquilidad y felicidad
Esto no quiere decir que comer chocolate nos ayude a superar una depresión, pero en cierta medida sí contribuye a estimular una sustancia en el cerebro llamada triptófano, la cual está relacionada con la serotonina. Esta hormona está vinculada con las sensaciones de tranquilidad, felicidad y sedación. De este modo, se explicaría que cuando nos sentimos tristes o angustiados deseamos consumir chocolate.
3. ¿Por qué cuando tengo la menstruación me apetece más chocolate?
Esta pregunta tiene una respuesta científica. Resulta que el chocolate es rico en magnesio. Cuando tenemos la menstruación podemos tener en nuestro cuerpo falta de este mineral. Consumir chocolate en este momento ayuda a estabilizar los niveles de azúcar en sangre y regula la intensidad de la menstruación.
4. Estimulación natural
Gracias a la teobromina que contiene, se estimula nuestro sistema nervioso central y se dan efectos similares al consumo de cafeína. Además, también nos encontramos con la feniletilamina que ayuda a mejorar el estado de ánimo y tiene un efecto parecido a las anfetaminas en cuanto que le da al chocolate las propiedades adictivas.
5. Fluidez mental y placer
Las grasas que posee el chocolate, lejos de ser malas para la salud (aunque siempre sin excesos), ofrecen sensación de placer. Al mismo tiempo, los carbohidratos que hay presentes hacen que vaya más cantidad de oxígeno al cerebro y, de este modo, permite mayor agilidad mental.
Y lo más importante de todo: el chocolate NOS GUSTA y es uno de los placeres de la vida, así que ¿cómo no vamos a darle un mordisco a ese brownie? J ¡Disfrutad del día!
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