Beatriz Alonso Sánchez es pedagoga y psicóloga en Centro Psicología Bilbao, donde interviene en el campo de la reeducación y orientación a familias. Está especializada en Atención Temprana, tratamiento del TDAH y de las dificultades de lectoescritura, y entre sus aportaciones al Centro destaca la creación de un curso intensivo de Técnicas de Estudio que actualmente tiene una gran demanda. 

  1. Las personas aprendemos durante toda la vida, pero, el entrenamiento en Técnicas de Estudio, ¿es apropiado para cualquier edad? ¿Dirías que hay alguna edad límite, tanto superior como inferior, para poder impartir el curso?

Personalmente aconsejo el entrenamiento específico en técnicas de estudio a partir de 5º de primaria en adelante. Antes de este curso, generalmente se entrena y refuerza mucho la capacidad de memorizar frases o pequeños textos, y se tiende a preguntar de forma literal la información. Sin embargo, a partir de 5º de primaria nos encontramos con preguntas en los exámenes que piden a los niños que relacionen cosas, que lo expliquen, que lo justifiquen, etc. y la cantidad de materia también es mayor. Por ello, a partir de este año se suele hacer necesario aprender a aprender. En cuanto a la gente más mayor, no existe edad límite. Hemos contado con alumnado universitario y personas adultas que quieren prepararse oposiciones y no saben cómo pueden estudiar de modo más eficaz, y todas ellas han concluido el curso satisfechos con lo aprendido y les ha parecido de gran utilidad.

2. Muchas veces serán los padres de los estudiantes (y no los propios estudiantes) quienes apunten a sus hijos al curso. En este caso, ¿son efectivas las técnicas de estudio cuando la persona que está recibiendo el curso no viene por iniciativa propia, o incluso está desmotivada? ¿Qué haces en estas situaciones?

Cuando una persona llama para pedir información, lo primero que hago es conocer de forma general la situación de ese estudiante. No recomiendo este curso a todos los estudiantes que van mal, porque hay que tener en cuenta que es un curso cerrado de 10 horas, y algunas personas necesitan grandes cambios de hábitos e incluso tienen importantes dificultades de aprendizaje. Cuando hay problemas de falta de hábito, por ejemplo, es preferible realizar un entrenamiento en técnicas de estudio más prolongado en el tiempo. Por ello, el perfil que detecto adecuado para aprovechar al 100% el curso de técnicas de estudio es aquella persona que, dedicando tiempo a estudiar, no sabe cómo hacerlo o pierde de forma llamativa las horas sin aprovecharlas bien. Este curso enseña la técnica, el cómo y, en definitiva, a ser más eficaz y eficiente. En este sentido, cuando alguien viene “obligado”, la expectativa es peor y a veces entran con peor pie. Sin embargo, también he de decir que durante estos años impartiéndolo me he encontrado con personas que venían obligadas en un inicio, y después al ver de qué se trata y que les facilitará el estudio, han cambiado de opinión.

3. Cuando alguien pide comenzar un curso de Técnicas de Estudio, ¿qué factores hay que tener en cuenta para personalizar el material y el enfoque?

Lo primero que tengo en cuenta cuando llega alguien al curso de técnicas es saber qué técnicas conoce ya, cuáles utiliza, qué expectativas tiene con el curso, qué espera aprender, qué cree que necesita cambiar para ir mejor, y un largo etcétera. Es decir, aunque es un curso con un temario “cerrado”, siempre se personaliza para que cada uno lo pueda realmente aprovechar.

Por otro lado, son varios los factores a tener en cuenta. En términos generales, hay que partir del curso en el que están. No es lo mismo enfocar esta formación a una alumna de 6º de primaria que a una estudiante de medicina. Seguramente haya técnicas comunes, pero habrá otras diferenciadas en función de las demandas que requiere cada curso.

Otro factor a tener en cuenta es si el curso se imparte de forma individual o grupal, porque en función de la cantidad de asistentes, las dinámicas cambiarán. Aún así, siempre se trata hacerlo de forma activa, práctica y participativa.

Finalmente, cuando me encuentro con estudiantes de universidad, hay que tener en cuenta el tipo de Grado que están estudiando. No es lo mismo estudiar Filosofía que Ingeniería de Caminos, y hay que contar con ello cuando se les está enseñando a estudiar.

4. El curso que se imparte en Centro Psicología Bilbao ha sido diseñado por ti. ¿Qué te llevó a seleccionar cada una de las técnicas que enseñas en él?

Para seleccionar estas técnicas me he basado en que sean prácticas, es decir, que impliquen un estudio activo en el cual la persona tiene que estar “haciendo cosas” y no sólo leyendo y releyendo. He tenido en cuenta también aquellas técnicas que durante mi experiencia como estudiante me han servido y me siguen sirviendo a día de hoy. Entiendo que mi labor a la hora de impartir el curso es ofrecer a los alumnos y alumnas una amplía gama de técnicas o modos diferentes de hacer las cosas, porque siempre parto de la idea de que cada persona es un mundo, y que lo que a mí me funciona a otro igual no. Por eso, este curso de técnicas de estudio ofrece mucha variedad y formas alternativas de hacer lo mismo, igualmente eficaces. Lo importante es que conozcan cómo, para que después puedan elegir en función de cómo son o de qué se les pide.

5. Con una duración de 10 horas, ¿es suficiente?

Si la persona que acude al curso tiene hábito de trabajo y el principal problema es que no sabe cómo estudiar y lo hace todo de memoria, por ejemplo, sí es suficiente con 10 horas. No hay que olvidar que son 10 horas para enseñar técnicas concretas, entenderlas y aplicarlas. Lógicamente, se espera que mientras se imparte el curso el estudiante aplique las estrategias aprendidas y, una  vez finalizado, las siga utilizando.

Por el contrario, 10 horas no son suficientes para cambiar hábitos de estudio o generar rutinas. Si lo que falla es eso además de la técnica, solemos recomendar iniciar un trabajo en reeducación porque conlleva más sesiones y se puede realizar un seguimiento mayor.

6. Este curso se lleva impartiendo una década. Teniendo en cuenta que a lo largo de estos años han pasado por él muchos estudiantes, ¿consideras que es eficaz?

En estos años he observado que el curso es eficaz para personas que invierten excesivo tiempo en estudiar y luego los resultados no son los esperados. También es útil para aquellos que, aunque sacan buenas notas, creen que pueden ser más eficaces. Y para las personas que tienen problemas de concentración derivadas de un estudio memorístico. Cuando estas personas aprenden a estudiar de forma activa, automáticamente sus problemas de atención mejoran.

En otros casos me he encontrado con personas que no tenían mucho hábito de trabajo por desmotivación, y con el curso se han dado cuenta de que se puede estudiar de una forma más activa y menos monótona, y eso les ha ayudado a estar más motivados y verse más capaces de sacar adelante sus estudios. Por lo que en principio, sí me parece un curso eficaz para los objetivos que se proponen y, además, me parece un aprendizaje útil para toda la vida, porque en la actualidad es cada vez más necesario seguir formándose en la edad adulta.

7. Y finalmente, ¿quién imparte el curso de técnicas de estudio?

En el centro trabajamos un equipo de psicólogas y pedagogas especializadas en educación. Todas estamos formadas para impartir el curso del mismo modo; siguiendo el mismo enfoque, metodología y contenidos. Hemos realizado reuniones conjuntas y formación interna para intentar estandarizar los procedimientos del curso. Sí vemos importante que lo impartan personas formadas de forma específica en técnicas de estudio y con amplía experiencia en educación. Y gracias a eso vemos, cómo año tras año, viene gente al curso referenciada por otros antiguos asistentes.

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